Seguimos hablando del vino Amarone della Valpolicella. Pero ahora no nos centraremos en el vino en sí sino en las uvas del Amarone, las que se utilizan para su elaboración. Las más importantes son la Corvina y la Corvinone.
Ambas son difíciles de ser encontradas y su producción es muy escasa. Hay menos de 4.856 hectáreas en el mundo de estas uvas, y parece ser que ambas solo crecen en la región denominada Valpolicella.
La DO
En dicha región, la Valpolicella, tienen un comité que aplica y legisla un marco regulador para proteger la naturaleza histórica de la tierra alrededor de Verona. Sabemos que no es un caso especial, ya que en toda Europa la DO tratan justamente de regular la calidad del vino que allí se produce. Y como en el resto de Europa, la plantación de viñas también está reglada bajo las leyes de la UE y del marco regulador.
Es decir, aunque la plantación de cepas y de las uvas autóctonas sea escasa, no está permitido plantar viñas nuevas. De forma general, la regla dice que si una bodega quiere plantar un nuevo viñedo, tendrá primero que arrancar un viejo viñedo para liberar espacio.
Entre las uvas más populares que se elaboran el Amarone están:
- Corvina (técnicamente Corvina Veronese)
- Corvinone
- Rondinella
- Molinara
La Corvina
Los enólogos de la región le dirán que los mejores y más raros vinos de Valpolicella provienen de la uva Corvina. Se trata de una autóctona de la región de Verona y cómo ya sabemos, es particularmente indicada para la pasificación.
Las bayas de la uva Corvina son de tamaño medio, ovales y de color azulado oscuro, formando racimos en forma piramidal. Su nombre, fue adjudicado gracias a su color oscuro. Corvina en italiano significa cuervo, y en este caso, la uva corvina es “oscura como las plumas de un cuervo”.
Los vinos producidos con esta variedad presentan aromas de cerezas, rosa, canela. También tienen un toque almendrado, además del frescor conferido por su óptima acidez. Cuando los rendimientos son más altos (mayor producción por viñedo), los vinos tintos producidos con la uva Corvina pueden ser más ligeros, frescos y frutados, como en los ejemplos más clásicos de Valpollicella y Bardolino.
Rondinella y Molinara
Históricamente, las uvas Rondinella y Molinara fueron muy dominantes en la región, sin embargo, tienden a producir uvas de menor calidad debido a su alta productividad.
La Rondinella
La uva Rondinella se encuentra con mayor facilidad en el Véneto, en realidad casi no se ve fuera de allí.
La Rondinella es una cepa de alto rendimientos, aunque la uva se utiliza raramente en la producción de vinos varietales. La casta es empleada en blends al lado de la uva Corvina, añadiendo sabor marcado a los vinos.
Posee ramos de dimensiones medias y formatos cilíndricos. Esta uva es considerada una variedad rústica y se adapta fácilmente a suelos que contengan alta cantidad de arcilla.
La Molinara
La uva Molinara también es autóctona de Italia y recibe ese nombre por tener sus uvas envueltas en una fina capa blanca, con una apariencia que sugiere haber sido salpicados de harina blanca. Por eso, “molinara”, que significa “molino” o “molinero”.
Se cree que esta variedad de uva ha surgido en Verona, en la región de Véneto. Gran parte de su cultivo todavía se da en la región norte de Italia.
En el interior del país, pero sobre todo fuera de él, la uva Molinara puede recibir otros nombres. Es conocida como Rossara, Mullinari, Salata, Vespone, Rossanella, Brepon Molinario, entre otros.
Con la coloración azulada, la uva Molinara es famosa por la calidad y excelencia con que elabora los vinos de corte. Aporta más acidez y frescura a las variedades de etiquetas locales. En una mezcla con la uva Merlot, por ejemplo, Molinara es capaz de elaborar excelentes y suaves vinos rosados.
